Árbol de Granada injertado: Frutal apreciado por sus frutos redondos de cáscara rojiza y semillas jugosas, dulces o ligeramente ácidas, ricas en antioxidantes. Esta variedad injertada permite una producción más temprana y consistente, con mejor calidad de frutos y resistencia a enfermedades. Ideal para climas cálidos y secos, aunque se adapta bien a diferentes tipos de suelo. Alcanza entre 3 a 5 metros de altura y puede mantenerse compacto con poda. Comienza a dar frutos entre los 2 y 3 años.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.